En la calleja de los torpes
hay un bar para el silencio,
donde se sirven suspiros
amargos con nuez moscada.
Hay música de trompeta tenue,
envuelta con piano en seda,
y los borrachos cabecean
acordes de luz morada.
En la calleja de los torpes,
los gatos pasean alados de paloma
y las farolas alumbran llovizna.
martes, 8 de marzo de 2016
Calleja de los torpes.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
SIN VERSOS EN LAS YEMAS
Se marchitaron los brotes de versos en las yemas de estos sarmientos, gélidos de la nevada, y el racimo es promesa por incumplir. No abu...
-
Vestido de túnica de lluvia terca y constante, hago visitas programadas de protocolos de delirio. Sociedad, social, sociable, soci...
-
Yermo en palabras, catastrófico en versos, me derramo por los días en vertido silencioso y ajeno casi a esta atmósfera que improviso de ...
-
Sujétame un momento la vida que te construya un poema sin mucho cimiento, desmontable a tu antojo, de campaña, que te resguarde y te aco...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comente si quiere que se publicará si me place.