Asumo que matar,
si poder, pudiera,
matar, mataría.
Mal está,
no lo discuto,
pues reprochable es,
en avanzada sociedad,
volver al uso de la manada.
Más, mirad a ver,
qué cosas normalizamos
y si matar un poco
no es más leve
que la masacre estipulada.
Pido poco,
poca muerte y selectiva,
y me reprobáis vosotros,
los que aplaudís sangrías.
Dejádme pues,
matar muy leve,
mucho menos que un dron
o un dios inventado,
sólo lo justo,
no sé,
sin ruido.
Que si yo mato
no habrá bandera,
ni templo,
ni libro sagrado,
sólo matar,
honestamente,
políticamente correcto,
pues no seré yo
quien publicite condición
de la víctima propicia.
Venga,
no seáis así,
dejadme hacer lo habitual.
jueves, 9 de julio de 2015
Asesino.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
SIN VERSOS EN LAS YEMAS
Se marchitaron los brotes de versos en las yemas de estos sarmientos, gélidos de la nevada, y el racimo es promesa por incumplir. No abu...
-
Vestido de túnica de lluvia terca y constante, hago visitas programadas de protocolos de delirio. Sociedad, social, sociable, soci...
-
Yermo en palabras, catastrófico en versos, me derramo por los días en vertido silencioso y ajeno casi a esta atmósfera que improviso de ...
-
Sujétame un momento la vida que te construya un poema sin mucho cimiento, desmontable a tu antojo, de campaña, que te resguarde y te aco...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comente si quiere que se publicará si me place.