lunes, 11 de agosto de 2014

Llega un día

Llega un día,
dígitos de calendario,
en que procede la muesca
para una cuenta
que bien poco resuelve.
Llega un día
en que casi se mira
más hacia atrás,
pues lo de alante
se asume incierto.
Número impar,
indocumentado año,
regente de la cincuentena.
Llega un día,
eso,
otro día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comente si quiere que se publicará si me place.

SIN VERSOS EN LAS YEMAS

Se marchitaron los brotes  de versos en las yemas de estos sarmientos,  gélidos de la nevada,  y el racimo es promesa por incumplir.  No abu...