jueves, 21 de febrero de 2008

LO QUE HAY

Aunque no lo parezca,
puedo,
puedo abrir mis palomares
y entregaros vuelo en agasajo.
Aún pareciendo estatua,
tengo,
tengo mil danzas en los dedos
y piruetas de alma a granel.
Aunque no veais rostro,
solo máscara de acero,
guardo,
guardo sonrisas de todo tallaje
y besos de párpado al aire
y fruta fresca de labio.
Soy lo que veis
y lo que no.
Soy lo que enseño
y lo que escondo
tras un sencillo laberinto
de seto a media altura.
 

lunes, 18 de febrero de 2008

BANDERAS NUEVAS

Nuevas banderas
con urgencia cosidas
ondean en tierras
de espadas sin vainas,
siempre listas al degüello.
Y el César asiente
desde el trono de plomo,
expectante a la matanza,
a la fosa común
aún sin cubrir.
Ya se ven teas
encendidas de odio,
negras antorchas
antiguas,
nunca guardadas,
ávidas de incendio.
Y el mísero busca espejos
donde verse en su ambición,
mas no hay reflejo
en el humo de mortero.

martes, 12 de febrero de 2008

QUÉ SERÍA

Qué aires tendría
de no estar en la pecera
circundado de vidrios impolutos,
sin salida ni salto de agua ,
aséptico de filtrado.  
Qué aires aparte
de la burbuja limosnera.
Qué mares de ola,
qué espumas blancas,
qué corales rosados
fuera de la raíz pútrida,
decorativa de barnices
que estancan el alma.
Cómo sería el vuelo,
la travesía
y el camino
sin este penar
en reincidencia cíclica,
infierno en agenda,
en horario prescrito.
Qué pieles rozaría,
tersas,
sin escamas de reproche,
qué voces en susurro
ajenas al grito,
al aviso de caída
en bache kilometrado.
Qué humedades
y sabores
ajenos al insecto,
a la tierra mordida,
tendría en otro tiempo.
Qué sería si fuese,
si fuera afuera,
si huyera del aullido,
si viviera.

lunes, 11 de febrero de 2008

ELEGÍA EN ROZAES

Queda el eco
de tus pasos de madreña
por mi calle hueca,
donde ahora no silba el aire
pues cabizbajo transita.
Aún resuena la voz rota,
recreada en el gracejo,
la sorna,
el humor gentil,
resignado
de lujurias tardías
de improbable cumplimiento.
Triste levita la cayada,
huérfana de tu peso generoso
acompañado de leves pasos
de niña mía,
de curiosidades a la espera
de tus respuestas de cuento.
Te fuiste buscando aire,
robado por gorriones,
y el corazón,
desbordado de honesto,
cansado de labores,
se durmió en el bancal
de un huerto prestado,
abonando calabazín
y berza de pote.
Sin que estés
te mantengo,
impresa tu imagen
de charla al sol
con murmullo
de fuente fresca.
Rozaes de Bazuelo,
aldea minera y minada,
se agrietan tus bancos
de fachada,
llorando por Antonio
y su sentada generosa
de tertulia improvisada,
mas siempre sabia
de vivencia.
Tengo un hada inquieta,
ávida de detalles,
que yá sabe de tu ausencia
y calla,
regalándote silencios.

lunes, 4 de febrero de 2008

LEVE REVUELO

Miradas que aturden,
embriagan el ánimo,
y la voz,
susurro templado,
rellena vacíos
y meandros de arteria.
Hay luz escondida
bajo negro iris,
luz que embalsama,
encubando nidos de aves
que creía dormidas.
Aún quedan
gratos encuentros,
leves pellizcos de gloria.
Queda eco,
al fondo del barranco,
que devuelve el saludo.
 

SIN VERSOS EN LAS YEMAS

Se marchitaron los brotes  de versos en las yemas de estos sarmientos,  gélidos de la nevada,  y el racimo es promesa por incumplir.  No abu...